TEXTO NARRATIVO SOBRE MORELOS

JOSÉ MARÍA MORELOS Y PAVÓN

¿ALTEZA SERENÍSIMA O SIERVO DE LA NACIÓN?

José María Morelos y Pavón nace en la ciudad de Valladolid, hoy Morelia, nombre dado en su honor. De cuna humilde y viviendo en condiciones paupérrimas, no fue obstáculo para formarse y estudiar, además de poseer una gran inteligencia destacada por la suspicacia y deseos de aprender.

Siendo muy joven y trabajando con un familiar cercano realizando faenas de agricultor y arriero, Morelos se enamora de una joven. Después de confesarle su amor, descubre que no era correspondido; atenuado por la decepción amorosa, decide solicitar su ingreso al seminario. Luego de ser aceptado, y conducir una carrera dedicada al clero, conoce a quien fuera su maestro y modelo a seguir, Don Miguel Hidalgo y Costilla. Quien después de iniciado el movimiento de independencia y ponderar el potencial estratega de su discípulo Morelos, solicita a éste se incorpore a la lucha en el sur del territorio. Al inicio conforma un ejército no muy numeroso, pero bien organizado, otra de las cualidades del caudillo, por lo que es llamado “Rayo del sur”. Conociendo sus logros en el Congreso de Anáhuac, realizado en Chilpancingo, deciden nombrarlo “Su alteza serenísima”, título que Morelos rechaza en una franca muestra de humildad y patriotismo y elige el de “Siervo de la nación” por ser éste último el que va más acorde a sus pensamientos e ideales. Los cuales quedan plasmados en lo que todos conocemos como “Sentimientos de la nación”, escrito en 1814. Este documento contiene las aspiraciones del personaje ilustre, del héroe y del hombre que marcara el rumbo de la historia de nuestro país, porque luchó y entregó su vida por la soberanía y la no esclavitud. Así mismo constituye el artículo base para consolidar el primer Congreso Constituyente en Apatzingan, donde se decretó la libertad de la América Mexicana.

Finalmente fue apresado y fusilado en San Cristóbal Ecatepec, hoy Estado de México.

Actualmente Morelos representa uno de los héroes más aclamados por el pueblo de México, que ha dejado un legado de patriotismo, entrega y valor a las causas justas y democráticas, que deberían ser emblema del quehacer cotidiano de todos los mexicanos que buscamos una mejor patria y un país digno para vivir.